El emplazamiento, una parcela alargada según la dirección norte-sur, ofrecía la posibilidad de comunicación con el parque contiguo y vistas sobre el mar y las montañas próximas. El edificio se desdobla en dos plantas de forma que al volumen se accede desde la calle y desde el parque. Una plataforma exterior a una cota intermedia permite conectar todos los niveles de accesos y bajar desde la biblioteca hasta el parque. Un vestíbulo a doble levantada comunica visualmente la biblioteca, a la planta superior, y la escuela de adultos, a la planta inferior. A la fachada en el parque, los vidrios se protegen con paneles de chapa perforada de color bronce que segundos va girando el sol alrededor el edificio va adquiriendo diferentes tonos dorados. A la fachada en la calle, mucho más ciega, se contrasta el acceso con un gran cenador en voladizo. |